miércoles, 26 de agosto de 2020

mortum

En una casa fúnebre de la ciudad de Mar del Plata, un grupo de personas despedía a un ser amado. Se abrazaban, sollozaban, sufrían, lloraban.
De a poco se fueron retirando, cabizbajos, meditabundos e incrédulos.
Un hombre le preguntó a otro de unos 45 años, barba entrecana, con el casco puesto, a punto de subirse a la moto junto a su compañera- ¿vas? 
Sí, nos vemos allá- respondió con tristeza.
Un cuerpo yacía dentro del coche negro.
Almitas coloridas revoloteaban las cabezas de cada cual.

miércoles, 19 de agosto de 2020

sobras

 me hago vida       ahogo

desmigajo

hervor de los matices donde atardecen mis sienes

campo de pecho agitado

en que el tallo rompe la tierra


en el bruxismo que ahueca mis muelas        las de rabiar

las blancas banderas de paz

el exhorto cavilar de mis ojos

enmohecidos


rojo rojo rojo


mí músculo decrece 

es una boca muda     desvozada

el silencio puro         sin agua

sin asco       así 

ahogado por una mano sangrando


rojo rojo rojo


luminiscencia de mi cuerpo ante Febo

ante sus uñas que acarician o dañan

clavo su propia esfera en las pupilas inquietantes      inquietas


la realidad           mí realidad vaga en el bolsillo         faltriquera 

lata de enceguecer lo objetivo

lo muerto      lo por morir   peso

lo que tira las manos hacia el suelo 


agua agua agua


mi boca sesea de sed

la sangre lleva palabras hacia mi palma               ésta

la limpia        la sucia

la certera          la equivocada


mi mano que todo lo afronta

mi cara              que todo recibe

el esternón que soporta los embates          

los míos los de los demás


mis víctimas        mis victimarios

las aglomeraciones de sentidos

de sinsentidos 

la vida que me hacen    que me hago


para arrojar sobre la frente del futuro cenizas frías que sobrarán de mí

viernes, 14 de agosto de 2020

furibundo

 


¿y mi alegría que tiraba desde todos los mundos?

¿quedó colgada del sí

soslayando los temores sornamente??


yo que desafiaba los confines

el óxido de las mañanas    los malabaristas

con la puertita de la angustia entreabierta

me dispongo a cauterizar los advenimientos

los suicidios de la incertidumbre


la cicatriz viciosa que domina mis planetas

soldada al suelo caliente

y helado por dentro

¿hasta dónde llegará el corto aliento?

¿la caducidad de todo lo feliz?


los techos hojeados del continuar

tapan toda mi lluvia       la obstruyen

como una restinga al barco 

de amor que te llevás


¿qué escarcha puse contra tus sienes 

para que tu sentido anule el deseo

la serenidad          la desesperación de los sexos

los hijos         que jamás serán?


mía mía           tuyo tuyo

nos quedamos

con el furibundo que sopló

todos los pétalos de la paz



miércoles, 12 de agosto de 2020

suspenso

corre la tempestad en mi memoria

lo que fue pudo haber sido

en la asonancia de la piel

la mano suave que humectaba

mis escalofríos se aleja y no cesa

hicieron silencio mis huesos


habita el día dentro del corazón negro de la muerte

el amor descansa sobre la espera

al repentino golpe de regreso


la herida herida        ama con torpeza

con pasión sin ojos    no ve el daño 

que acaece sobre mi estrellita 

el pequeño sustento fue vencido por el peso de mí necedad


sangre seca dejé en su latente

sobre el petricor que abría mí respiro

quiero volver a esa amalgama de deseos

que hoy rompe la luna 

montando el lomo del pasado mi cuerpo se agita


la soledad se asolea sola

la rabia hinca el diente    se culpa

se enreda un alambre en el cuello

para dejar la poesía deshabitada




martes, 4 de agosto de 2020

sombra

qué manada hay en mi mano/ en estos siglos de 24 hs / donde el éxtasis es efímero y ajeno como el espíritu
la sombra ya no es dueña de los árboles ni las aves de sus flores/viene a traer el frío en su apagón
quién va a juzgarme ahora / a escuchar mis ronquidos sufrientes/ mis apestosas palabras
vengan a llenarme de clavos los ojos/ espántenme los azucares de la piel/ la corroída especia que me invade
a dónde irán a buscarme los espasmos / ahora que ya no tengo cuerpo/ ahora que mis hijos no danzan sobre mi vientre
y los motivos son velados a la vera de la cicatriz/ 
quiero decir/ cómo duele el dolor

naciendo

 hay ahí una eternidad un sendero donde me paro y mis manos son íntimas placebo de sus pieles voces de mi intelecto a quién acudo de vez en ...