miércoles, 12 de agosto de 2020

suspenso

corre la tempestad en mi memoria

lo que fue pudo haber sido

en la asonancia de la piel

la mano suave que humectaba

mis escalofríos se aleja y no cesa

hicieron silencio mis huesos


habita el día dentro del corazón negro de la muerte

el amor descansa sobre la espera

al repentino golpe de regreso


la herida herida        ama con torpeza

con pasión sin ojos    no ve el daño 

que acaece sobre mi estrellita 

el pequeño sustento fue vencido por el peso de mí necedad


sangre seca dejé en su latente

sobre el petricor que abría mí respiro

quiero volver a esa amalgama de deseos

que hoy rompe la luna 

montando el lomo del pasado mi cuerpo se agita


la soledad se asolea sola

la rabia hinca el diente    se culpa

se enreda un alambre en el cuello

para dejar la poesía deshabitada




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