domingo, 26 de febrero de 2017

Simples vitaminas

han de parir la tarde                los rostros clandestinos
etiquetados en la frente           por algunos cabellos de ángeles
no de sopas ni de guisos         sino de bípedos estupefactos
de facto                                   descorazonados por la hoz del egoísmo

ropas ilegales fabricadas con sobras de elegancia
cuando el mismo suelo sostiene ambas pesuñas
uñas juntamugre por todas partes

sombras equidistantes definen el mismo tono
siluetas oscuras traspasan bocas de tormenta
colillas contaminantes              pisoteadas

qué escama es la que hace la diferencia?
qué gusano ha de elegir su plato del día
una vez bajo tierra?

cuál de éstas simples vitaminas
hará arrodillar a los pájaros?

jueves, 16 de febrero de 2017

Beto

desde que le dijeron " te vas a romper el alma"
ésta se le cristalizó
y reposa sobre la humedad
mientras balbucea en su lenguaje de vino picado
agrio

su boca es una herradura que pende del ceño analfabeto
vetó su futuro Beto en los inicios de la nada
porque desde su nacimiento la nada era nada
y duraría para siempre

es como si Dios estuviese aún
escupiéndose las manos para comenzar su labor
no hay páramos ni Pedros en sus próximas cenizas

y menos semillas ni germinaciones
de su más tardía memoria
me moría de ganas de sacudirle la crueldad
que le retuvo tanta cordura     el espesor de la locura

las marcas de las monedas que le golpearon la frente
los jamáses que lleva entre las manos
cada pasado que le atraviesa la nuca

revoltijo de porvenir que finalizó
en el principio de sus derrotados días

jueves, 9 de febrero de 2017

fatuo

tentado ante el poder de tu brazo
que de un lado a otro atraviesa mi estómago
escribo

la peste en que naufragamos
cada instante               cada piedra
que irrita la planta de los pies
los ventrículos dorados detrás del pecho

el sopor en carne viva            el no abandono del ansia
la plena esclavitud de los sentidos
los espectros titubeando

la esencia de los dominios
la extinción de los demonios ante lo fatuo del querer

esos perros ilógicos que excrementan la muerte
esa paciente muerte que acabará con todo
menos con lo hecho

los desvencijados alambres que sostienen mis parpados
aguantando la plenitud de las palabras y esos rastros
que ni siquiera la salvaje oscuridad
apagará

sábado, 4 de febrero de 2017

últimos asientos

en los últimos cinco asientos del colectivo
sitio exacto en que viaja la poesía              está sentado
con su cabeza masticada por quienes miran para sí
con la cabeza a punto de ser regurgitada
por nuestro maldito instinto y algunos intrusos

sus vestigios oliendo a átomo desatomizado
a opacas sustancias beneficiosas
                                 para aquellos que quieren qué

ni un pequeño futuro se prende de su barbilla casi sin estrenar
y mi imaginación es un perro a campo abierto
un jáculo que quiere revertirlo
darlo vuelta de afuera hacia adentro
regresarle la vista a su corazón ciego
experto en inexactitudes tanto como yo

violentos pasos de la vida sobre su rostro carcomido
tempranamente                    inhumanamente

mente que miente              que se escarcha
en los momentos de preguntarse y
es una piedra a la hora de las respuestas

cuántas partículas de porvenir cabrán en sus manos?
cuántos instantes sobreviven entre sus paréntesis?

quizás los mismos que acaba de utilizar este poema
para dejarme solo

indomable

son miles los movimientos de la lengua
en el parto de cada palabra
la saliva licuada de una boca a otra
como líquido protector indisoluble

los pasos pasan pacientes sobre la mano de esta locura
de ese amor apalabrado en las fronteras de los cuerpos
las caderas emparentadas          los claustros     los deseos
las letras       en este camino alocado          exacerbado

apócrifos de la consciencia que chorrea entre los dedos
desandando las decisiones            acaparando
las anchuras del ansia               hacia dónde?
hasta cuándo?

emergencias en el querer ser             estar
entre las frases                    las fracciones
enigmáticas caricias del lenguaje

fuentes amorosas               poderosas
se mezclan en la indomable mano del poeta

naciendo

 hay ahí una eternidad un sendero donde me paro y mis manos son íntimas placebo de sus pieles voces de mi intelecto a quién acudo de vez en ...