viernes, 4 de noviembre de 2016

por Dios cero

revolvemos la basura        en esta vida
atada con alambre

y de la huerta   el huerto   o el orto
de los que alimentan la necesidad
sacamos verduras      frutas       flores de aspiración

para los que meten la espiga detrás del santo

aladas huyen las almas
de los que somos por Dios ceros
de cada uno de los que sonambuleamos
presente y futuro

herejes de la escasez      revolvemos contenedores
sin tenedores nos alimentamos de lo poco

jadeantes perros de exposición
ante quienes queremos simular o emular

pernoctar en la comodidad es triste
si la lluvia moja el lomo del sacrificado

a caja y caja se alimenta el aliento
desalentador     como la lengua del las víboras
áspera y puntiaguda       venenosa

colofones espesos donde nadar a esta altura o bajeza
a la que nos arrojamos como avaros al billete

a esta hora
en que todo deja de ser

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