ser un gigante
que enrolla las rutas
como una soga
atrayendo manantiales y prados
playas
montañas
el sacrificio nos atañe
el peso
el dólar
materiales que devorar
aguardamos el placer
y el nuevo sol
se adhiere al espacio
y volvemos a mirarnos las piernas
esas cadenas corroídas por el tedio
los ojos
son mariposas de alas secas
una manzana mordisqueada
que no acumula ni gusanos
atraer ciudades
paisajes
aunque la frente esté fruncida
y la lengua gastada
de alardear
...y pensé en los contrastes malditos que hay, entre un viaje al espacio y un niño sin pan... Silvio Rodríguez
domingo, 29 de noviembre de 2015
miércoles, 18 de noviembre de 2015
cegado
barcos
humectando el horizonte
surfistas atérmicos
enredados en la espuma
submarinos
con heridas del ochenta y dos
carpas usurpando arenas
la mirada es estéril
cuando uno trata de ver más allá
humectando el horizonte
surfistas atérmicos
enredados en la espuma
submarinos
con heridas del ochenta y dos
carpas usurpando arenas
la mirada es estéril
cuando uno trata de ver más allá
mar abierto
la nube negra
se posa sobre el mar
sombrero estricto
de la barca que extiende redes
donde los peces cambian de nombre
la gravedad sostiene su cuerpo
lo bambolea con calma
a punto de parir lluvia
los pescadores abren sus brazos
agradeciendo la bendición
se posa sobre el mar
sombrero estricto
de la barca que extiende redes
donde los peces cambian de nombre
la gravedad sostiene su cuerpo
lo bambolea con calma
a punto de parir lluvia
los pescadores abren sus brazos
agradeciendo la bendición
como globos de la infancia
tantas veces he pisado palos
oliendo a carroña
pero
ella siempre me rescató
volando por el cielo
el silencio
nos unió las bocas
ella cobijó mi rostro
mis emociones
levantó mi cuerpo moribundo
besó mi corazón dormido
meció las palabras
levitamos nuestros seres
como globos de la infancia
me cubrió de flores
de colores rojos
dormimos sobre árboles espesos
acarició mi cara
con indicios surcados
navegamos en barcas cromáticas
impermeables
como nuestro amor
nos albergaron paraísos
animales salvajes domesticados
mientras los niños
nos besaban los pies
aires celestes
en nuestras pupilas
en días aterciopelados
por estos caminos
de ir lejos
oliendo a carroña
pero
ella siempre me rescató
volando por el cielo
el silencio
nos unió las bocas
ella cobijó mi rostro
mis emociones
levantó mi cuerpo moribundo
besó mi corazón dormido
meció las palabras
levitamos nuestros seres
como globos de la infancia
me cubrió de flores
de colores rojos
dormimos sobre árboles espesos
acarició mi cara
con indicios surcados
navegamos en barcas cromáticas
impermeables
como nuestro amor
nos albergaron paraísos
animales salvajes domesticados
mientras los niños
nos besaban los pies
aires celestes
en nuestras pupilas
en días aterciopelados
por estos caminos
de ir lejos
En riesgo de extinción
sobre el inicio del arco iris
mi boca mendiga palabras
besos
huesos
mis ojos
miran el más acá
y el que vendrá
rastreo los pasos de la historia
entre rastrojos
que emularon al bien
busco futuros
colecciono utopías
en la cima de los pensamientos
enhebro la vida
en el ojo del porvenir
soy una remembranza de la bondad
que evita a cada paso
ser extinto
mi boca mendiga palabras
besos
huesos
mis ojos
miran el más acá
y el que vendrá
rastreo los pasos de la historia
entre rastrojos
que emularon al bien
busco futuros
colecciono utopías
en la cima de los pensamientos
enhebro la vida
en el ojo del porvenir
soy una remembranza de la bondad
que evita a cada paso
ser extinto
Negro
sobre el filo de la laguna
un funeral maloliente
pide a gritos
el final
la naturaleza muere
por un golpe negro
y blanco
una vorágine de tristeza
musicaliza
el canto áspero
impreso
en la inconsciencia
del difunto
un funeral maloliente
pide a gritos
el final
la naturaleza muere
por un golpe negro
y blanco
una vorágine de tristeza
musicaliza
el canto áspero
impreso
en la inconsciencia
del difunto
Aves
¿en qué lenguaje hablan las aves?
traspasando nuestro cráneo
como una proyección de luz
haciéndonos creer
que somos superiores
en ignorancia
permitiendo
que nos recubra un manto de cristal
intáctil
profano
solos
los bordes no pueden hablar
creímos ser estímulos
y somos piedras
escarchas
en la boca de un mendigo
estamos aferrados
a querer ser
aterrados
de ser
las aves
que picotean nuestras frentes
quizás
nos siente bien
una corona de retazos
las bacterias
se alojan en bocas abiertas
agrandados o sumisos
la tierra nos tomará
con los brazos
del tiempo
traspasando nuestro cráneo
como una proyección de luz
haciéndonos creer
que somos superiores
en ignorancia
permitiendo
que nos recubra un manto de cristal
intáctil
profano
solos
los bordes no pueden hablar
creímos ser estímulos
y somos piedras
escarchas
en la boca de un mendigo
estamos aferrados
a querer ser
aterrados
de ser
las aves
que picotean nuestras frentes
quizás
nos siente bien
una corona de retazos
las bacterias
se alojan en bocas abiertas
agrandados o sumisos
la tierra nos tomará
con los brazos
del tiempo
Amor osado
me vas a desear con amor
a malparir el genio
vas a acariciarme la cara
a apoyarla en tu vientre
secarás mis lágrimas
el sudor
rondarás mi corazón
la impaciencia
disfrutarás las flores frescas
las marchitas
me verás amapola
cardo
fruta
rama seca
me brindarás tu cariño
tu discordia
uniremos lo bifurcado
hasta que un día
nos quedemos solos
a malparir el genio
vas a acariciarme la cara
a apoyarla en tu vientre
secarás mis lágrimas
el sudor
rondarás mi corazón
la impaciencia
disfrutarás las flores frescas
las marchitas
me verás amapola
cardo
fruta
rama seca
me brindarás tu cariño
tu discordia
uniremos lo bifurcado
hasta que un día
nos quedemos solos
Comenzando el día
grillos y grilletes
esquemas disueltos
en el día a día
perros vaporosos
en la mañana tibia
levantados a punta de pies
polvo asentado
escombros de sí y no
esparcidos en las calles
caminantes sin historias
decorando el paisaje tenue
martillos a los gritos
pavas tiznadas deseando agua
bienaventurando al fuego
abrazos y sonrisas
puteadas y calambres
se desgajan barrenderos
desde las cinco de la mañana
camiones perseguidos por trotacalles
y yo
con voz áspera
sin entender nada
esquemas disueltos
en el día a día
perros vaporosos
en la mañana tibia
levantados a punta de pies
polvo asentado
escombros de sí y no
esparcidos en las calles
caminantes sin historias
decorando el paisaje tenue
martillos a los gritos
pavas tiznadas deseando agua
bienaventurando al fuego
abrazos y sonrisas
puteadas y calambres
se desgajan barrenderos
desde las cinco de la mañana
camiones perseguidos por trotacalles
y yo
con voz áspera
sin entender nada
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