me amarrás la silenciosa nervadura
la cadencia de mi piel
en el estuche donde alojo los sentidos
yace la dormilona melanco
zurcimos con los sueños
el perfume a alma extraviada
hay chillidos cercanos a tu claridad húmeda
entre las diez y diez de la mañana
y de la noche también
mi parte invadiendo los esteros
impacientes clamores
expulsando los salvajes impulsivos del deseo
crepita la rebeldía la cerrazón de tu aliento
y yo
con mi calavera entre las manos
predigo el futuro
...y pensé en los contrastes malditos que hay, entre un viaje al espacio y un niño sin pan... Silvio Rodríguez
miércoles, 11 de enero de 2017
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
naciendo
hay ahí una eternidad un sendero donde me paro y mis manos son íntimas placebo de sus pieles voces de mi intelecto a quién acudo de vez en ...
-
extraño los colores del silencio el verde de tus iris verter mis sentimientos en el aire tomarme de esa mano como pétalos suaves y ...
-
de vez en cuando habito en sus delicias en ese mundo inexplicable invulnerable en ellos la verdad no fue parida lo real golpea su c...
-
dormido en tu piel de cala y pistilo desgranando mi lado izquierdo mudo al resguardo de las heridas palpando el canto onírico de l...
No hay comentarios:
Publicar un comentario